La psicología positiva es una parte de la psicología que se centra en explorar y promover aquellos aspectos positivos de la experiencia humana. En vez de pretender conocer y tratar aquellos trastornos  o disfunciones que pueden evocar a problemas de salud mental, se centra en fomentar aspectos como la felicidad, el bienestar, las fortalezas personales y la gratitud.

Uno de los pilares de la psicología positiva es cultivar una mentalidad de aprecio y gratitud y lograr el bienestar emocional y mental. Y por eso, aplicarla a la sexualidad puede ayudarnos a transformar y enriquecer nuestras experiencias íntimas. 

1. Conecta la psicología positiva y la sexualidad

La psicología positiva promueve emociones que nos hacen felices, fortalezas personales y relaciones saludables. Si lo llevamos al terreno sexual, esto se traduce en:

• Lograr en bienestar y disfrutar del sexo. Practicarlo siempre que nos apetezca, crear un entorno seguro y tratar de conectar al máximo con el momento presente.
• Potenciar nuestras fortalezas para sentirnos más comodxs. Piensa en cómo te gusta hacerlo, cómo te sientes más empoderadx, qué cosas te gusta hacer y que te hagan y cómo puedes sentirte de la mejor forma posible.
• Mejor sólx que mal acompañadx. Recuerda que es clave sentir conexión y bienestar con la otra persona. Una relación saludable es aquella que siempre multiplica, nunca resta. Así que si no es el caso, siempre puedes disfrutar solx de tu sexualidad.

2. La importancia del autoconocimiento y la autoaceptación

La psicología positiva nos anima a abrazar nuestra singularidad, reconociendo que la verdadera intimidad comienza con la aceptación de uno mismx. Entender nuestras propias necesidades y deseos nos ayudará a crear una base sólida para una conexión más profunda con los demás. Conócete, acéptate y quiérete.

3. Fortalece tus momentos de placer

Hemos visto que los principios de la psicología positiva son la gratitud y el aprecio. Practícalos también en tus relaciones sexuales con pequeños gestos que lo transmitan a la otra persona o te transmitas a ti mismx. Caricias, besos, abrazos profundos, masajes, son pequeñas acciones que pueden convertir una situación fría o incómoda en un momento de placer y conexión. Al terminar, no te olvides de dedicar unos momentos de reflexión o de valorar cómo ha sido la experiencia.

4. Mindfulness y sexualidad

Vivir en el momento presente siempre es una práctica que nos ayuda a transformar nuestras experiencias sexuales. Al hacerlo, dejamos atrás cualquier distracción y preocupación para sumergirnos en el placer y las sensaciones de la sexualidad.

5. Abraza este momento

El sexo puede ser un momento único y especial, un momento de intimidad, un acto de generosidad: nos volcamos en dar y darnos placer para lograr este estado de bienestar al que se refiere la psicología positiva. Abraza el momento sin prejuicios, sin estigmas, sin miedos. Experimenta, diviértete y disfruta. ¿Has probado ya los juguetes sexuales by Memimo? ¡No te pierdas Ecco, Vela o Orbis para llevar tu placer al máximo nivel!